Cómo la psila del almendro afecta la floración y métodos de control biológico y convencional

La psila del almendro (Brachycaudus amygdalinus) es una plaga que afecta significativamente al cultivo del almendro, especialmente en España, impactando directamente en la floración y, por consiguiente, en la producción de almendras. Este artículo detalla cómo esta plaga afecta el proceso de floración y describe los métodos de control, tanto biológicos como convencionales, para un manejo integrado de plagas en la agricultura.

¿Cómo afecta la psila del almendro a la floración?

La psila del almendro se alimenta de la savia de las yemas florales, hojas y brotes tiernos del almendro. Esta acción debilita el árbol y compromete el desarrollo de las flores. Las yemas florales afectadas pueden no abrirse, o las flores que logran desarrollarse pueden ser deformes y poco viables para la polinización. Como resultado, se produce una disminución en el número de almendras que el árbol puede producir. Además, la psila segrega una melaza que favorece el desarrollo de hongos como la negrilla, lo cual dificulta la fotosíntesis y debilita aún más al árbol. En conjunto, estos efectos perjudican la producción de almendras y la salud general del cultivo.

Métodos de control biológico

El control biológico de la psila del almendro se centra en fomentar la presencia de sus enemigos naturales. Algunos de los depredadores más efectivos son:

  • Anthocoris nemoralis: Este insecto depredador se alimenta de las ninfas y adultos de la psila.
  • Chrysoperla carnea: Las larvas de este insecto, conocidas como crisopas, son voraces depredadores de la psila.
  • Adalia bipunctata: Conocida como mariquita de dos puntos, este insecto también se alimenta de la psila.

Para fomentar la presencia de estos depredadores, se recomienda evitar el uso indiscriminado de insecticidas de amplio espectro y promover la biodiversidad en el cultivo mediante la plantación de cubiertas vegetales.

Métodos de control convencional

El control convencional de la psila del almendro implica el uso de insecticidas. Sin embargo, es crucial aplicarlos de manera responsable y selectiva para minimizar el impacto en el medio ambiente y en la fauna auxiliar. Se deben seguir las recomendaciones de un especialista en agricultura para determinar el producto y la dosis adecuada. El momento de aplicación es fundamental, buscando coincidir con el pico de población de la psila, generalmente en primavera. Además, se debe considerar la rotación de productos para evitar la aparición de resistencias.

En resumen, la psila del almendro es una plaga que puede comprometer seriamente la floración y la producción de almendras. La implementación de estrategias de control integrado, combinando métodos biológicos y convencionales de manera responsable y sostenible, es esencial para el manejo efectivo de esta plaga en el cultivo del almendro en España y otras regiones productoras, asegurando así la salud y la productividad del cultivo.